En respuesta (no publicada) a columna de la Sra. Carolina Tohá, en La Tercera, 17 de junio 2022
SEÑOR
DIRECTOR:
Hay algo de conveniencia en exponer recién ahora lo que hace años se viene consolidando en la política oficialista como “la convicción de la conveniencia”. El actuar ético, que debiera ser permanente y situarse por sobre cualquier propósito político, es convenientemente obviado cuando éste cuestiona sus objetivos y métodos. No es casualidad que la convicción de la conveniencia la practican quienes promulgan que “el fin justifica los medios”.
Mientras algunos siguen soñando, el país enfrenta el abismo, con compatriotas asesinados en Araucanía, estudiantes que golpean a carabineros y a sus propios profesores—una anomía nacional—. Pero la conveniencia se impone y hace caso omiso del hecho de que aún tenemos una Constitución y leyes para nuestra protección en igualdad de derecho.
Espero que no sea demasiado tarde para reconocer que predomina la ética de la liviandad, en otras palabras, que nuestras autoridades han actuado y siguen actuando de forma inmoral.
Beatriz Maturana Cossio